Cuanto dinero cuesta un barril de petroleo?

Para determinar cuanto cuesta un barril de petroleo, debemos estudiar su historia, hace mucho tiempo encontrar un barril de petróleo en el mundo era relativamente fácil había mucho y en lugares muy accesibles sin embargo con el tiempo se volvió más complicado encontrar petróleo, por lo que se hizo indispensable investigar e invertir en nuevas formas.

Precio del barril de petroleo:

Lo primero que hay que decir, es que sobre cuanto cuesta un barril de petróleo, es que hay visiones muy distintas, en función de la procedencia de la disciplina del individuo al que le preguntemos.

El economista, por definición, tiene un enfoque distinto al geólogo.
El geólogo lo que ve es los recursos que hay, por definición son finitos, y eso es una visión muy estática.
En cambio, para el economista, la viabilidad de la explotación de los recursos depende de las condiciones del mercado.

Es decir, si los recursos se agotan, el precio sube y se busca un sustituto.
Y esa es la historia de la humanidad, de recursos que se han agotado y que se han sustituido por otros.
Entonces, preparémonos en emergencia, porque, o lo hacemos nosotros o lo hace la naturaleza de todas formas, es decir, yo puedo seguir engañándoles a ustedes, y decir que «vamos a vivir muy bien», «vótenme, vamos a vivir muy bien», y, luego, engañarles, porque no va a dar más de sí el asunto.
Pero también les puedo decir, «prepárense para lo peor», y vamos a ver, dentro de lo peor, que va a haber cada año, un 6% menos de energía, un 6% menos de actividad, vamos a ver cómo podemos seguir distribuyendo cosas, de forma que los seres humanos, puedan seguir viviendo con una dignidad mínima, humana.

La evolución del coste del barril petroleo:

La Agencia Internacional de la Energía hizo público, ya en noviembre de 2010, un informe en el que reconocía que la producción de petróleo convencional había llegado a su cenit.

El pico del petróleo es un concepto que se acuñó hace ahora unos 60-70 años, para explicar la evolución de la producción de los campos de petróleo, incluso, de regiones y del mundo en su conjunto.
Lo que significa es que, cuando uno está extrayendo petróleo, no puede extraerlo al ritmo que le da la gana, sino que hay una primera fase exploratoria en la que conoces mejor los campos, vas siendo capaz de sacar más y más petróleo cada año, y llega siempre un momento inevitable, en el que se llega al máximo ritmo de extracción, la cantidad de petróleo que tú puedes ganar cada año, y llegado a este máximo de extracción, después de unos pocos años, la cantidad de petróleo que uno saca cada año va disminuyendo.
Si bien las dos transiciones energéticas del mundo moderno: la de la biomasa al carbón, que tuvo lugar a fines del siglo XIX, y la del carbón al petróleo, que tuvo lugar a mediados del siglo XX, podían aventurar la linealidad de una tercera transición hacia el uso masivo de un nuevo recurso energético, la realidad demográfica y el crecimiento económico de las últimas décadas, vienen a confirmar, que tal transición, no es más que una entelequia.
El crecimiento ilimitado de recursos financieros, premisa incontestable del sistema capitalista, choca con la finitud de los recursos naturales, a cuya extracción, transformación y transporte, los primeros están orientados.
No obstante, esta desvinculación creciente entre capital financiero y capital natural, sigue alimentando la fantasía de producir energía a cualquier precio.
Algo que para algunos, se traduce en una clara refutación de la idea del «Peak Oil» y, para otros, en la mejor explicación de las sucesivas crisis financieras que venimos sufriendo.